Cuando te conocí nunca me imaginé que podría llegar a amarte tanto. Recuerdo que tenía mucho miedo de tantas cosas y que no entendía como debía comportarme contigo. Era tímido, incluso algo amargo, pero sin darme cuenta fuiste tirando todas esas barreras que había levantado frente a mí y llegaste adonde nadie más había visto dentro de mi corazón.
Descubriste mis razones, mis miedos, mis alegrías, todo lo que me movía y reviviste en mí una llama que se hallaba extinta hacía años. Tu calor me fue llenando el alma por completo y a partir de ese momento... ¿sabes cuál?, cuando estuve a punto de perderte y viajé para poder verte, cuando te miré corriendo hacia mí con esa expresión de sorpresa e incertidumbre, que me di cuenta de que no podía vivir sin ti. Que tú eres la persona que deseo para mí.
Han pasado ya dos años y no siento que sea tanto tiempo, quizás porque no nos vemos tanto como desearía, pero desde que estoy contigo todo luce mejor. Tengo esperanza y la seguridad de que cuando me sienta desfallecer puedo contar contigo. Sé que no todos los momentos que hemos pasado han sido buenos, pero eso no significa que mi amor por ti disminuya. No he de dejar que mis errores te hagan sufrir. Quiero que sientas mi calor hasta que te queme, que puedas confiar en mí como confías en tus nakamas, que no tengas miedo y que pase lo que pase, tengas la seguridad de que siempre voy a estar contigo.
Te lo he dicho antes, eres la persona más hermosa que he conocido. El fuego de tu pasión es intenso y mi llama es una muy fuerte también. Sé que el esfuerzo no lo es todo y no quiero que mi amor se quede en meros intentos. Mi mayor satisfacción es amarte de un modo que pueda ver de nuevo el brillo de tus ojos.
08 de Octubre de 2012. Meine Liebe, Ich Liebe Dich
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